DIY Pastel japonés queso y chocolate blanco

Hola chicas ¿cómo están? Pues por fin es viernes y como saben aunque la cocina no es para nada lo mío, la repostería sí que me gusta así que para el DIY de hoy les traigo una receta de una versión de queso y chocolate blanco del pastel esponjoso japonés que seguramente han visto en facebook y que nos hace salivar. Tenía mucho tiempo que quería intentarlo, incluso había comprado los ingredientes hace un par de semanas pero no había tenido el tiempo para hacerlo. Lo primero son los ingredientes:

120 g de queso crema
120g de chocolate blanco
3 huevos
papel encerado
refractario o molde

Toma los huevos y separa la yema de las claras. Pon una tapa de plastipack sobre el recipiente de las claras y mételas el refrigerador

Pre calentar el horno a 170°C
Derretir el chocolate en baño maría
Incorporar el queso crema con el chocolate y mover muy bien
Ahora incorporar las yemas
Deberás batir las claras de huevo hasta que tengan una consistencia de merengue
Incorpora las claras batidas a tu mezcla, hasta que todo esté perfectamente mezclado
Ahora corta el papel encerado para que tenga la forma de tu molde, pon un poco de aceite vegetal al fondo, y vierte tu mezcla

Deberás colocar tu molde sobre una bandeja con agua en el horno, de manera que el agua ayude a su cocción
Hornea el pastel a 170°C durante 15 min.
Después hornea a 160° otros 15 min
Y por último deja el pastel 15 min más en el horno apagado
Puedes espolvorearle un poco de azucar glass
Deberás esperar a que se refrigerador para comerlo

Si quieres ver como hacerlo por una chica japonesa mira el video aquí

¿Y mi experiencia? Mi arma secreta: una batidora de mano kitchenaid durante todo el proceso. Separar las yemas y los huevos me costo bastante, para mí que no estoy acostumbrada a cocinar, pero después todo fluyo perfecto. Eso sí, tienes que tener preparados los ingredientes y también les cuento que sobre el recipiente donde derretí en baño maría el chocolate, fui incorporando todo y siempre con fuego lento. El problema fue cuando mi molde redondo no cabía en la bandeja y tuve que improvisar con uno cuadrado. Al final no me quedo tan esponjoso, no se sí hice algo mal, o fue el tema del molde. Pero vale 100% la pena intentarlo, puedes sentir el chocolate en la mezcla y eso sí sabe delicioso.